Un equipo que promete una potencia de sonido de 140 vatios por canal y cuenta con las certificaciones de los sistemas de sonido de Dolby, DTS y THX para la banda sonora de las películas.
Un equipo de sobremesa pensado para convertirse en el cerebro que procese todo el audio y el vídeo del salón (no hay más que echarle un vistazo a todas las conexiones de su panel trasero). Para empezar, tiene nada menos que ocho puertos HDMI, seis de entrada y dos de salida, para interactuar con televisores y equipos que reproducen imágenes en alta definición.
Siguiendo con las conexiones de vídeo, encontramos cinco de vídeo por componentes, seis S-Video y nueve de vídeo compuesto. Pero lo mejor está en el sonido, ya que el equipo cuenta con “infinitas” salidas analógicas y digitales que nos permitirán, entre otras cosas, conectarle todas las fuentes de audio que imaginemos y un conjunto de cajas acústicas repartidas por el salón más un subwoofer activo que refuerce los tonos graves.
También está preparado para reproducir las películas a 24 imágenes por segundo (como en el cine), y tanto las entradas de audio como las de video con configurables y asignables. Cuenta además con un puerto Ethernet para conectarnos a nuestra red doméstica y reproducir música y vídeos guardados en otros equipos. También podemos interactuar con un iPod, recurriendo en este caso a una conexión especialmente pensada para los docks de la propia Pioneer.
Semejante mastodonte audiovisual es el resultado de dos años de trabajo entre Pioneer y la división ICEpower de una firma especializada danesa. Y lo cierto es que el trabajo ha merecido la pena. Eso sí, este Susano costará nada menos que 6.500 euros. El que busca calidad no tiene más remedio que rascarse el bolsillo.
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